Santa Fe de Antioquia es una ciudad del noroeste de Colombia. Es conocida por sus edificios coloniales, las calles con adoquines y los caramelos de tamarindo. El Puente de Occidente, de madera y acero, fue construido en el siglo XIX por el ingeniero local José María Villa (quien también trabajó en el Puente de Brooklyn, en Nueva York) y está suspendido sobre el río Cauca en el noreste. En la plaza principal de la ciudad, se encuentra la Catedral Metropolitana encalada, con su alta torre.
Es llamada Ciudad Madre y Cuna de la Antioqueñidad, esta importante ciudad carga en todos sus rincones el honor de mantener intacta su arquitectura colonial como todo un patrimonio nacional, cultural e incluso se contempla la posibilidad de que sea declarada patrimonio de la humanidad. El visitante encontrará todo un mundo de colores y sabores junto con sus habitantes amables y alegres.
Santa Fe de Antioquia es una de las ciudades coloniales mejor conservadas de Colombia. Es una de las excursiones de un día más populares que se pueden hacer desde Medellín.
La ciudad ha retenido intacto el carácter y el sentimiento propio de un pueblo con varios cientos de años a sus espaldas con sus calles estrechas y empedradas, sus casitas blancas con balcones típicamente coloniales de madera tallada, sus pequeñas iglesias, y su plaza central que sirve de centro social de la ciudad.